Es fácil recordar datos cuantitativos como nombres de picos, altitudes, desniveles, orientaciones, acotaciones geográficas, coordenadas GPS, grados de dificultad en diferentes escalas ... nos sobran mediciones y este blog es sólo para guardar pequeños detalles que sirvan para pulsar el nodo neuronal que dispara en nuestro cerebro evocaciones, recuerdos, sensaciones, sugerencias y demás impresiones cualitativas

2015-04-30

Ibon de Arlet (1986 mts)

Ibón de Arlet, helado y apenas visible bajo la nieve 
La carretera, aún sin mantenimiento, cortada por un alud

Actividad en solitario para descubrir este ibon y su refugio, muy famoso entre los franceses pero menos conocido para los españoles. Cruzando el tunel del Somport, a tan solo dos km de la salida francesa, hay un desvío en Les Forges d'Abel a la central d'Estaens donde una carretera forestal termina en el bosque de Espelunguére. Travesía muy fácil por senderos que coincide en su mayor parte con la HRP (Alta ruta Pirenaica) y, por tanto, balizados con las marcas rojiblancas.
El primer imprevisto que me encuentro es la pista cortada por una avalancha, aparco y comienzo a caminar a 1190 mts, llegando pronto al aparcamiento de Espelunguère. Ante la ausencia de nieve en las cumbres que circundan el recorrido, dejo el piolet en el coche.
Profusamente señalado, a 3:40 horas según el indicador, el sendero se adentra hacia el bosque y cascada de Espelunguère. 



A través del hayedo aún sin hojas pero con verdes calcetines de musgo, sintiendo el húmedo frescor atomizado de la cascada, la senda discurre con suave pendiente y vistas que obligan a parar continuamente para hacer fotos.

Superado el bosque, se abre el valle ampliamente. Aquí sale el desvío para el ibón de Estanés y parking de Sansanet, cruzando al torrente por una pasarela metálica. Yo sigo atajando los zig-zags de la pista y girando decididamente al Norte para penetrar de nuevo en el bosque de Espelungúere: hayas, tejos, abetos ...
El bosque sufre varias avalanchas en los inviernos, como así demuestran muchos troncos y ramas caídos por el suelo y en medio de la senda, dando la impresión que este año todavía no ha pasado mucha gente por aquí. Finalmente, la senda corona un primer collado con amplias vistas a la Montagne de Coueq que cierra al Norte el horizonte.
Muy cerca, nevada, veo la pista forestal que viene dando largo rodeo para comunicar las cabañas pastoriles que abundan en estos valles. En este collado veo al fondo, abajo, la Cabane Grosse tambien conocida como Cabane d'Atsout y más conocida aún porque allí se elaboran y venden quesos.
 Panorama al Este: Midi y Pico de los Monjes
Cabane d'Atsout. Aujourd'hui fermé, désolé, pas de fromage de brebis.
 Panorama al Sur: Punta Escarra, Pala de Ip, Moleta, Collarada
Hacia el Este: Gaziés, Aas, Ayous, no estoy seguro ¿alguien los reconoce?
Meses más tarde, Oct15, Quique y Fernán realizan el recorrido y los identifican como "Pico de los Monjes, y más a la derecha el cresterío Belonseiche-Arnousse, límite de Astún con el Valle de Aspe."
 Circo de Aspe, macizo de Bernera, Bisaurin.
 Espelunga, collado de Gabedaille, Acue

A partir de Atsout, la senda se cubre de nieve a trozos, gira al NE, llega al col d'Arrouy y vuelve a girar al NO buscando el col de Lapachouaou, vaya nombres que se gastan los bearneses. Cada vez más nieve, cuesta encontrar el itinerario cubierto a trozos por neveros, así que me dirijo al col más o menos por donde puedo.
Collado de Lapachouaou, el paisaje cambia drásticamente ¡todo está nevado!
 Montagne de Banasse.

Oculta por la nieve, a saber por dónde, la senda HRP recorre la vertiente norte de Banasse y conduce hasta el refugio y lago de Arlet. Sin huellas ni traza, nadie a la vista y con fuerte sensación de soledad, estos valles aún no se han despertado del letargo invernal.
Guiándome por las cabañas de pastores, intento dirigirme hacia el lago de Arlet. La primera cabaña que encuentro es la de Gourgue Seque, con su lago helado en forma de corazón.
Zoom al Caperan de Sesques
Siempre hacia el Oeste, subiendo y bajando ondulaciones con más o menos pendiente, llego a la Cabane de Lurbe, casi enterrada por la nieve que llega al tejado.

Abriéndome huella monótonamente, atravesando valles laterales y esperando siempre que tras el siguiente estará el refugio de Arlet, continúo dirección Oeste. Ni trazas ni rastro de pasos de dos patas, pero sí bastantes de cuatro patas. 
Por fin supero una loma con amplias vistas, tengo enfrente el cordal fronterizo así que el lago ya está muy cerca. 
 Cielo de nubes lenticulares sobre la Mesa de los Tres Reyes, Anie, Billare
Ya veo el refugio, col de Arlet y Pic d'Aillary
 Me ha costado tanto encontrarlo que no paro de hacer fotos 
El refugio está cerrado y sin guarda hasta Junio, pero la zona de invierno se encuentra limpia y cuidada. Tiene capacidad para siete plazas con colchonetas, mantas y teléfono de socorro (en la foto de abajo, encima de la botella verde)

Afuera, el ibón sigue completamente helado y la nieve más pastosa por el calor del día.
El Midí d'Osseau se asoma allá lejos. Para volver sigo mis huellas tratando de atajar las zetas de subida pero también de evitar alguna pendiente que, sin piolet y en solitario, prefiero no arriesgar.
Descendiendo ahora más pegado a la línea de crestas, no paso por las modernas cabañas de Lurbe ni de Gourgue Seque con sus placas solares, pero descubro la antigua Cabane de Caillaous, arqueología pastoril hecha de lajas y piedras. Su pequeño lago, como todos, helado.

¿Cual es el collado de Lapachouaou?, debe ser el de la izquierda, por el que he subido, pero ahora, más directo, cruzo un poco más alto por la derecha.
Mirada hacia atrás, al fondo del cordal fronterizo, veo el Pic d'Aillary, de donde vengo.
Regreso por el mismo camino, deslizándome por todos los neveros que encuentro, acortando las curvas del sendero rápidamente llego al col d'Arrouy con las vistas del atardecer sobre los macizos de Collarada y circo de Aspe. 


Más fotos del bosque y de la senda barrida por las avalanchas del último invierno.



Y con este reportaje más fotográfico que montañero, termino la actividad del día.

24 Abril 2015. Rafa

2015-04-23

Puy Arcol norte (2417 mts)

Puy Arcol 
Ya nos apetecía algo de Montaña con ambiente. En nuestra agenda teníamos pendiente el Puy Arcol, un pico del que no sabíamos nada prácticamente, pero habíamos leído algo sobre su accesible collado norte que permite el paso en travesía desde La Sarra, en Sallent al Balneario de Panticosa pasando por el collado de Pondiellos, una ruta alternativa a la ya conocida de Respomuso.
El Puy Arcol es la última cima de una pequeña cadena montañosa que desciende hacia el sur desde el Pico de Sanchacollons. Esta cadena va de Oeste a Este, empezando por Musales, Sanchacollons, Forqueta y Tebarray. Al Este del Puy Arcol se abre el barranco de Pondiellos, que desciende desde los 2900 mts hasta el embalse de Lanuza, en Salllent, salvando más de 1500 mts de desnivel. 
Comenzamos la marcha caminando por la pista que sale junto a la presa de La Sarra.
Peña Foratata
A nuestra espalda quedan los picos de Ferraturas, Soques y Soba














La pista va ascendiendo en lazadas que se pueden ir cortando mediante un sistema de atajos marcados con hitos. La verdad es que Rafa y yo hacía tiempo que no nos veíamos y teníamos mucho que contarnos. El caso es que habla que te habla nos pasamos casi todos los atajos. Llegamos a la última zeta, donde la pista ya toma dirección oeste hacia la ruta del Ibonciecho. 
Vista hacia La Partacua. Peña Retona y Pala de los Rayos




















Las reseñas que hemos consultado siguen por esta pista hasta el repetidor y la mal llamada cabaña de pastores, ahora refugio de un artista zaragozano amigo de las ranillas, para girar de allí hacia el Ibonchiecho y alcanzar el valle de la Cubetilla, recorriéndolo en su totalidad hasta el collado de Puy Arcol, a 2340 mts.
Sin embargo, nos parece que se puede subir directamente desde aqui hasta la cabecera de la Cubetilla, muy cerca del collado, pues unas canales de nieve dura parecen facilitar el ascenso. No lo pensamos más y nos introducimos en un vallecito que asciende hacia el Este. Algún mojón aislado indica la traza a seguir, imaginamos en dirección al collado de Puy Arcol, ya que por aquí no hay ninguna otra ruta.
Entramos en el valle que nos lleva hacia Puy Arcol
El valle, orientado hacia el Oeste y protegido del sol por las paredes del Puy Arcol Sur conserva bastante nieve, y a estas primeras horas lo suficientemente dura como para exigirnos el uso de crampones. 
Ascendemos rápidamente hasta que comienza a estrecharse, y además no parece verse el final. La lengua de nieve se divide en dos, la de nuestra izquierda termina en una pequeña brecha que imaginamos dará hacia la Cubetilla, con acceso al collado de Puy Arcol. La tomamos porque el final de la derecha no se ve claro. Entre las dos lenguas una mole rocosa que, para entendernos entre nosotros, denominamos "la isla".
El valle se estrecha y no vemos claro el final, tomamos esta lengua de la izquierda.
Efectivamente, hemos acabado en el valle de La Cubetilla, y enfrente tenemos los collados de Puy Arcol separadas por una pequeña cota. Ahora ya lo tenemos claro. Ya reconocemos el Musales y el barranco del Ibonciecho, e incluso vemos la pantalla repetidora, el chalet del ingeniero y el final de la pista. Nosotros nos dirigiremos hacia el Este, al collado Sur que es de donde parte la Cresta hacia nuestra cima, pero nos queda una última dificultad, para evitar el descenso a la Cubetilla tenemos que flanquear la cara norte de "La Isla" con fuerte pendiente de nieve helada que exige cramponear con atención. El pasaje es corto y nos deja cerca del collado Sur.
De izquerda a dcha. Musales, Sanchacollons y collado de La Cubetilla
Llegando al collado  sur. Se ven antiguas huellas
Collado de Puy Arcol (2350 mts) Infiernos y Garmo Negro-Argualas






















La vista desde el collado hacia el Este es magnífica. Tebarray, Infiernos, Garmo Negro, Argualas y Feniás. Sólo el llegar hasta aquí merece la pena. Una gran panorámica sobre estas altas cumbres, pero esta vez descubriendo su cara más oculta, la oeste. Estas laderas todavía no han recibido el sol y tienen un aspecto bastante severo y sobre todo muy alpino. 
A nuestra espalda. Cresta fronteriza, Pico de Soques y Picos de La Soba
Un inmenso alud ha barrido el barranco de Pondiellos

A nuestros pies el barranco de Pondiellos desagua en Sallent, después de un descenso de casi 2000 mts. Un inmenso alud caído desde la marmolera O. de los Picos del Infierno ocupa su lecho hasta la cota 1900 mts. A nuestra derecha se ve la cresta pedregosa del Puy Arcol, unos 60 mts por encima del collado. 
Hacia la cima de Puy Arcol N.
Garmo Negro, Argualas y Feniás
La cresta pedregosa que nos separa de la cima es muy fácil. Hacia la derecha hay un buen patio, pero las escasas dificultades se pueden pasar fácilmente por la izquierda. Alguna pequeña trepada sin complicaciones ameniza la corta ascensión. Unos diez minutos de subida y llegamos a la cumbre. Parece mentira que una montaña tan modesta pueda estar tan estratégicamente situada. La verdad es que la vista es muy completa. Nos sorprende lo relativamente "cerca" que vemos el Tebarray. Quizás para una próxima vez nos atrevamos a traspasar el collado de Puy Arcol y penetrar en este mundo que se nos antoja desconocido......


Desde la cima. Por la izda. Musales, Sanchacollons, Collado Cubetilla, Forqueta
¡Cuántas ascensiones! Y las que nos quedan
Desde la cima, Rafa piensa en la cima Sur (para otro día)
El valle por el que hemos subido. Al fondo embalse de La Sarra
Foratata, emblema del Valle de Tena
Por izda. Llena Cantal, Tebarray, Infiernos
Panorámica. Haz click para ampliar.
Estamos un buen rato en la cima disfrutando del paisaje. La temperatura es muy buena y las nubes que van creciendo no parecen de importancia. 
Después de reponer fuerzas iniciamos el descenso hacia el collado, donde nos volvemos a poner crampones, aunque la nieve ya se ha reblandecido por el sol de mediodía.
Descendemos hacia el collado
Llegando al collado
Mientras bajamos del collado y desde esta perspectiva vemos que "La Isla" se podía haber atravesado por su filo sin necesidad del  flanqueo expuesto, tambien observamos la salida de la lengua derecha y nos lanzamos por ella, tiene mayor pendiente, sobre todo la salida desde la brecha, pero acorta aún más este descenso ya de por sí muy directo. 
Entramos en el vallecito nevado rumbo a la pista del Ibonciecho
El itinerario elegido asciende por nieve hasta el colladin arriba a la izquierda
Descendemos por el valle nevado a buena marcha. La verdad es que en poco más de una hora después de abandonar la cima llegamos a la zeta de la pista que abandonamos esta mañana en el ascenso. Nos quitamos los crampones y cogemos un atajo, ahora sí, que nos deja en un pis pas en el parquin de La Sarra. El sendero es muy agradable y corta varias veces la pista atravesando un frondoso bosque
Llegando a la pista. A nuestra espalda el Puy Arcol
La verdad es que Puy Arcol, del que hasta hace poco desconocíamos su existencia, nos ha sorprendido muy gratamente por su fácil acceso y las panorámicas de estas "caras ocultas". Su collado en sí ya merece la pena visitarlo. Nosotros no desistimos en volver, atravesarlo, y entrar en este región tan alejada de la civilización. Pura aventura.

12 Abril 2015. Rafa y Enrique
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